GR-11 en el valle de Ansó
Una infinidad de rutas diferentes
Los senderos de Gran Recorrido (GR) son una red de itinerarios peatonales señalizados, formados por la conexión de sendas, caminos y pistas. Se desarrollan a lo largo de grandes trayectos de cientos de kilómetros, uniendo puntos distantes y recorriendo parajes, comarcas o pueblos lejanos entre sí.
Los GR están enfocados para las personas que les guste andar y tengan preparación para ello, aunque muchos de los destinos que recorren el GR-11 pirenaico se pueden hacer de forma individual y su dificultad disminuye.
El GR-11 es un sendero de Gran Recorrido que cruza en unos 800 kilómetros todo el Pirineo, desde el mar Cantábrico (Cabo de Higuer) al mar Mediterráneo (Cabo de Creus). Es una ruta principalmente montañera y una de las más transitadas de España. Se encuentra señalizada en prácticamente su totalidad por marcas blancas y rojas.
Sus etapas recorren la frontera natural que son los Pirineos, discurriendo generalmente entre pueblos, refugios o albergues, dónde el senderista podrá aprender la cultura de estas localidades, sus historias, leyendas y costumbres. Una forma perfecta de descubrir día a día y etapa a etapa de esta ruta, nuevas experiencias, emociones y momentos compartidos con otros compañeros de camino.
La ruta no busca las cimas altas, sino que transcurre por valles y collados tratando de minimizar el esfuerzo, aunque es perfectamente posible hacer desvíos en el recorrido para hacer cimas.
El sendero GR 11, de 46 etapas, cuenta con casi una decena de variantes y su recorrido se ha ido modificando con el paso del tiempo.
Nosotros te podemos hacer un pequeño resumen de las etapas que pasan cerca de la Villa de Ansó. También te proponemos que vengas a visitar el pueblo y pases una noche en nuestro acogedor hostal.
La ruta que transcurre por nuestra zona del pirineo, es una vía segura a través de bosques, lagos, collados y cortados que adquiere la categoría de Sendero Turístico de Aragón y que se puede hacer íntegra o por etapas. Los itinerarios de los que te informamos comienzan desde el oeste partiendo del pueblo de Isaba, localidad de nuestro valle vecino del Roncal, hasta llegar al Valle de Candanchú al este de nuestra zona.
- Por Belabartze: Etapa muy corta, puede considerarse como una jornada de descanso si has empezado en etapas anteriores. Comenzando desde el pueblo de Isaba en el valle vecino del Roncal, la senda pirenaica deja atrás las últimas casas y desciende hacia el barranco de Belabarze. Etapa sencilla de unas 3 horas de duración y poco más de 11 km de recorrido. Se recomienda esta opción en invierno, con mal tiempo o si se pretende hacer una etapa doble enlazando con la siguiente.
- Por Peña Ezkaurre: Los que tengan ganas de coronar una gran cumbre pueden elegir esta otra opción. Pasados poco más de 2km desde el pueblo de Isaba, siguiendo la senda pirenaica, la pista se bifurca a la derecha hacia la variante GR11.4 por Peña Ezkaurre. Esta etapa es de dificultad alta, desaconsejamos hacerla en época invernal si no tienes el equipamiento necesario. Tras más de 6 horas de caminata y habiendo recorrido casi 18 km, Zuriza te da la bienvenida al Pirineo Aragonés, una imagen imborrable de la naturaleza en su máximo esplendor.
En Zuriza existe un refugio donde dormir o también existe la opción de seguir la ruta hasta Ansó, a 14 kilómetros por pista semiasfaltada o por el antiguo camino. Una buena opción para visitar el pueblo y pasar la noche en nuestro Hostal.
Una bonita etapa entre los valles de Ansó y Hecho. La ruta arranca desde la parte baja del camping de Zuriza. En la primera parte se asciende hasta el collado de Petraficha. Después hay que descender hacia el valle del Aragón-Subordan desde donde podrás ver unas vistas espectaculares de la Selva de Oza o el Castillo de Acher. Para terminar el recorrido llegarás al valle de Aguas Tuertas, uno de los más bonitos del Pirineo. Es una etapa larga, pero sin dificultad, casi 6 horas de recorrido con un total de 19 km de andada. Para pernoctar en el final de la etapa está el refugio libre de Aguas Tuertas o también durante el camino podéis encontrar otros refugios como Chipeta Alto
El valle de Aguas Tuertas es una de las etapas más preciosas de toda la travesía y uno de los sitios más bonitos del Pirineo. Una gran pradera encajada entre toscas montañas y atravesada por un pequeño río que zigzaguea formando meandros increíbles que seguiremos en dirección al Ibón de Estanés. Aunque no hay que descender hasta este, desde el collado de Toronez d’as Cabretas llegaremos a un cruce en el tomaremos un nuevo trazado del GR11 que se dirige al refugio de Lizara a través del valle de los Sarrios y compartiendo parte del trayecto con la Senda Camille (marcas verdes y amarillas). Al final de la etapa tras casi 14 km de recorrido y más de 4 horas de andada llegaréis al Refugio de Lizara, lugar perfecto para poder descansar y pernoctar.
Este trazado entre Lizara y Candanchú te descubre alguno de los valles más olvidados de esta parte de los Pirineos. Esta senda del GR 11 atraviesa el Plano de Lizara, muy cerca del dolmen. La cordillera se va enderezando y empezaremos a entrar en la alta montaña con varios pasos por collados y picos por encima de los 2.000 metros como el collado del Bozo o Collado de Esper, en los que habrá que tener en cuenta la climatología y la época de nieves. También hay que atender al pronunciado descenso por el valle de Esper, superando el vertiginoso paso de «la Oreja». Tras más de 16 km en un total de 5 horas y media, atravesaremos la estación siguiendo en todo momento la pista que desciende al Párking de Candanchú y finalmente llegaremos al pueblo.